En medio del “vacío de poder”, la vice del Senado Jeanine Añez se mostró predispuesta a comandar el Ejecutivo para convocar a nuevas elecciones.
Horas de caos y pura incertidumbre se viven en Bolivia luego de la renuncia de Evo Morales este domingo, que desembocó en un “vacío de poder”. La principal incógnita pasa ahora por quién tomará su lugar, en medio de la ola de dimisiones de funcionarios.
Tanto su vice Álvaro García Linera, la titular del Senado Adriana Salvatierra y su par de Diputados Víctor Borda, también dijeron adiós. Con este delicado escenario suena con fuerza el nombre de Jeanine Añez como posible reemplazante temporal, quien este mediodía confesó a los medios que estaría dispuesta a asumir ese rol.
Entre la ola de renuncias que le siguieron a la dimisión de Morales está la del primer vicepresidente del Senado Rubén Medinacelli, que le dejó el camino allanado a la legisladora de la oposición y vice segunda del Senado. Entre lágrimas dijo que la dirigencia tiene la obligación de darle “certidumbre” a la gente y que asumirá temporalmente la presidencia “si hay acompañamiento”. Aclaró que, caso contrario, “aceptará lo que se decida” en la bicameral Asamblea Legislativa, que deberá resolver la acefalía.
“Ocupo la segunda vicepresidencia y en el orden constitucional me correspondería asumir este reto con el único objetivo de llamar a nuevas elecciones“, dijo la senadora proveniente la alianza opositora Unidad Democrática.
Agregó que “quiere dar una solución a la crisis por la que atraviesa el país” e insistió que en caso de asumir su mandato será “transitorio, con el objetivo de llamar a elecciones transparentes”. Tras las denuncias de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre graves irregularidades en los últimos comicios -que iniciaron el conflicto político y social- la legisladora precisó que el pueblo “no quiere fraudes ni incertidumbre”.
Añez es reconocida por sus fuertes críticas contra la gestión de Morales. Licenciada en Ciencias Jurídicas y Derecho, entre 2006 y 2008 participó en la redacción de la nueva Constitución de Bolivia como asambleísta constituyente. Desde 2010 representa al Departamento del Beni en la Asamblea Nacional después de ser elegida como senadora por el partido del Plan Progreso para Bolivia Convergencia Nacional.
